domingo, 28 de septiembre de 2008

ATTAC España apoya la Jornada Mundial por el Trabajo Decente

Manifiesto de Apoyo
La Jornada Mundial por el Trabajo Decente es una acción reivindicativa convocada a nivel mundial por la Confederación Sindical Internacional (CSI) y sus estructuras regionales en América, África, Asia y, en Europa, a través de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), además de diferentes redes de organizaciones no gubernamentales.

Su objetivo es sensibilizar a la ciudadanía, promover ante los responsables políticos y empresariales del mundo el trabajo decente, y la erradicación de la pobreza. También quiere colocar el trabajo decente en el centro de las políticas de cooperación internacional al desarrollo.

El concepto de trabajo decente, introducido y promovido por la Organización Internacional de Trabajo (OIT) en el año 1999, es una herramienta básica de lucha contra la pobreza y supone un salario digno, protección social básica y derechos sindicales y laborales fundamentales.

Cualquier persona debería poder llevar una vida digna y tener cubiertas sus necesidades básicas. Sin embargo, el 80% de los trabajadores/as del mundo, es decir, la mitad de la humanidad, carecen de protección social, y esta situación se ceba principalmente en las mujeres. Por tanto, es imprescindible reforzar y ampliar la cobertura de la protección social, las pensiones, las prestaciones de desempleo, la protección de la maternidad y servicios sanitarios para todos, incluyendo en estos beneficios a los trabajadores/as de la denominada economía informal.

Gobiernos, instituciones multilaterales y empresas multinacionales, son responsables del modelo neoliberal de globalización que produce pobreza e injusticia social. También lo son por falta de regulación democrática de los mercados, de las actuales crisis financiera, alimentaria y energética, cuyas peores consecuencias sufrirán los más débiles.

Muchas veces se aduce que los países y/o empresas no pueden permitirse salarios justos y mejores condiciones laborales, sin embargo, los costos a corto plazo se verían rápidamente superados por los beneficios de todo tipo a medio y largo plazo.

La falta de trabajo y el empleo informal y precario es, para muchas personas en el mundo, sinónimo de pobreza. Por ello, el trabajo decente es la mejor manera de luchar contra la pobreza.

El modelo neoliberal de globalización ha producido grandes diferencias sociales. Ni los gobiernos nacionales, ni las instituciones internacionales han sabido, o querido, poner las reglas adecuadas. Es necesario otro modelo de desarrollo que coloque en el centro la dignidad humana. Para ello resulta imprescindible que el trabajo decente determine las políticas de las instituciones multilaterales internacionales (Banco Mundial, Naciones Unidas, Fondo Monetario Internacional, Organización Mundial del Comercio…)

Esta Jornada Mundial tiene como objetivo la universalización de los principios y derechos fundamentales del trabajo, el trabajo decente y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio de Naciones Unidas, como medios para combatir la pobreza y la desigualdad, fomentando la solidaridad internacional. El trabajo decente resulta especialmente necesario ante la actual crisis del sistema económico.

Esta movilización mundial es la primera de estas características que convocan los sindicatos en su historia. En Europa, los trabajadores/as han sido convocados por la CES para manifestarse el 7 de octubre por los objetivos comunes y, además, contra el proyecto de Directiva europea de tiempo de trabajo, que permitiría realizar, en determinados casos, jornadas de hasta 60 y 65 horas semanales, previendo también que la jornada pueda establecerse por acuerdos individuales, en lugar de por convenios colectivos. Obviamente, esta directiva es incompatible con el concepto de trabajo decente.

También lo son el trabajo informal o no declarado, la precariedad laboral y el elevado riesgo de siniestralidad laboral, que se dan en el mercado laboral español. Por eso exigimos medidas que erradiquen o reduzcan significativamente estas lacras laborales.

Hay que señalar que el sector informal de trabajo ha ido en aumento en los últimos años, tanto en los países empobrecidos como en los industrializados. Se realiza al margen de las normas laborales, lo que motiva mayor precariedad laboral e injusticia social. No debemos olvidar que el empeoramiento de las condiciones laborales en otros países repercute directamente en las condiciones laborales de los trabajadores/as españoles/as.

Hay que cambiar las formas comerciales injustas, y asegurar que se utilicen como un instrumento para lograr el trabajo decente y el desarrollo sostenible –que comprenda sus principios medioambientales, sociales y económicos-, incluyendo una clara referencia al respeto y acatamiento de las normas fundamentales del trabajo y de los derechos humanos. El comercio no debe ser un fin en sí mismo, sino un sistema de intercambio justo que erradique las desigualdades y la pobreza.

Por todo ello, las organizaciones abajo firmantes llamamos a los trabajadores/as y a la ciudadanía española, a participar activamente en las acciones que el próximo 7 de octubre se realizarán en las empresas (asambleas, paros simbólicos...), y en la calle (concentraciones, manifestaciones...)

¡¡¡Por la universalización del trabajo decente!!!
¡¡¡Por la erradicación de la pobreza!!!
¡¡¡Contra la Directiva europea de tiempo de trabajo!!!

Jornada mundial por el trabajo decente ; CC.OO. ; UGT

Organizaciones que apoyan:
ACSUR-Las Segovias, Asamblea de Cooperación por la Paz, ATTAC, CECU, Coordinadora de ONGD-España, Consejo de la Juventud, Foro Social de Madrid, Red de Fundaciones Paz y Solidaridad-CCOO, Intermón-OXfam, ISCOD-UGT, Paz Ahora, Plataforma 2015 y más, SETEM.

lunes, 22 de septiembre de 2008

Globalización: Dejando atrás a la OMC

Cuando se escriba la historia de los cambios sísmicos que ocurren hoy en la economía mundial, el fracaso en julio de 2008 de los intereses corporativos y de algunos gobiernos en ampliar la Organización Mundial del Comercio (OMC) a través de la Ronda de Doha pasará a ser un momento decisivo.

Fue en esta ciudad a orillas del lago, donde los negociadores tiraron la toalla después de siete infructuosos años tratando de ampliar un conjunto particular de políticas corporativistas, a las cuales la mayoría de los gobiernos ya le habían dado un "no", una y otra vez (en Seattle en 1999 *, México en 2003, y en Ginebra en 2006). El Director General de la OMC, Pascal Lamy, intentó un impulso de última hora para concluir un acuerdo de Doha pidiendo una reunión exclusiva, sólo por invitación, para el mini ministerial de alrededor de 30 de los 135 países miembros de la OMC, en Ginebra el mes pasado. Esto a pesar de amplias divergencias en las posiciones políticas dentro de las áreas de negociación y a pesar de que la administración Bush no tiene autoridad para firmar cualquier posible acuerdo.


Y como si no fuera suficiente abrogación del proceso democrático el excluir a cuatro quintas partes de la membresía de la OMC de las negociaciones de la notoria "Sala Verde", cuando las conversaciones fallaron en converger entre esos 30 países, Lamy continuó las negociaciones con apenas siete miembros, incluyendo a casi todos los países del mundo desarrollado pero irónicamente excluyendo por completo a todos los países de África en una ronda a la que sus proponentes todavía descaradamente llaman la "ronda del desarrollo". Muchos países en desarrollo como Bolivia y Kenya, e incluso el anfitrión, Suiza, plantearon importantes preocupaciones con el procedimiento en relación a su exclusión de la reunión, pero sus preocupaciones fueron desestimadas por Lamy.


Si se les hubiera permitido a los países africanos participar en las deliberaciones secretas, ellos hubieran exigido resoluciones sobre cuestiones como la reforma de los subsidios al algodón de EE.UU. las cuales impulsan a que 20,000 productores estadounidenses sobreproduzcan algodón, resultando en la erosión de los ingresos de 10 millones de agricultores africanos en países como Benín, Burkina Faso, Mali y Chad. Estos subsidios sacan a muchos de estos agricultores del negocio y reducen ingresos claves para los presupuestos de salud y de educación para los pobres. Algunos observadores han puesto en relieve la firme posición de los africanos en las cuestiones de desarrollo cuando se les permitió participar en la mesa de negociaciones en el pasado. Por eso muchos han argumentado ahora que el deseo de los países ricos de evitar las cuestiones clave para África, como el algodón, es la verdadera razón del colapso de las negociaciones. Pero esta parte de la historia parecería demasiado fea para ser publicada en la prensa estadounidense.


La reciente cobertura de los medios en Estados Unidos del fracaso de las conversaciones se ha centrado en las posiciones de negociación de diversos países, sobre todo culpando a India y a China. Pero cuando uno profundiza en las cuestiones subyacentes, está claro que lo que está en juego en las negociaciones es mucho más que simplemente el "comercio", y que el colapso se debió a fuerzas mucho más grandes que las posiciones de cada uno de los países. En particular, se debió a las cuestiones que rodean las crisis globales de alimentación, clima y finanzas, así como la falta de avances en el desarrollo debido a la incapacidad de las políticas neoliberales para promover efectivamente el crecimiento o la reducción de la pobreza. Dado los cambios en la dinámica política internacional, así como en las agendas globales, el colapso en las negociaciones en curso tendrá repercusiones de gran alcance más allá de la OMC.


Soberanía alimenticia o crisis alimenticia


Tomemos por ejemplo la agricultura, que ha sido el tema citado por la mayoría de las explicaciones sobre el colapso de las negociaciones. India, con el apoyo de la inmensa mayoría de los países en desarrollo, luchó dentro de la OMC por el derecho a que se le permitiera proteger a sus agricultores, la seguridad alimenticia, el desarrollo rural y en contra de la vulnerabilidad a la volatilidad de los mercados de productos básicos. Los aumentos repentinos de productos extranjeros subvencionados han devastado tanto a los productores agrícolas locales, los cuales representan las tres quintas partes de la fuerza de trabajo en una población de 1.100 millones de personas, de los cuales se dice que más de 100.000 campesinos se han suicidado en los últimos años. Sin embargo, los negociadores de EE.UU. no permiten las protecciones y exigieron un mayor acceso a los mercados de los países pobres para sus exportaciones agroindustriales, mientras que se niegan a reducir los límites aplicados a las subvenciones internas a dos veces por debajo de su tasa actual .


No es una coincidencia que las conversaciones se derrumbaron por temas relacionados a la agricultura, en un año cuando países, desde Haití hasta Pakistán, y desde México hasta Camerún, han visto disturbios desatarse a causa de los precios de alimentos. Aunque los precios de los productos alimenticios están, afortunadamente, registrando un pequeño descenso, la crisis alimenticia está erosionando la lealtad a los dogmas de libre comercio en la agricultura. Muchos países en desarrollo que antes podían atender a sus propias necesidades alimenticias dependen ahora en gran medida de las importaciones. Dos tercios de los países en desarrollo son ahora importadores netos de alimentos. Décadas de políticas de ajuste estructural dictadas por el FMI y el Banco Mundial, junto con los "acuerdos de libre comercio", así como las políticas de la OMC, han obligado a los países en desarrollo a reducir los aranceles. Esto, combinado con altos niveles de subsidios permitidos en los países ricos, ha aplastado la capacidad productiva de muchos países en desarrollo. Las políticas de la OMC también han contribuido a la erosión de la granja familiar en Estados Unidos y otros países ricos. La expansión adicional de la OMC no resolverá, y por el contrario, agravaría la crisis alimenticia, a pesar de las afirmaciones de Lamy.


Otro factor clave en juego en las negociaciones de Ginebra ha sido la continua movilización de la sociedad civil global en contra de la expansión de estas políticas fallidas. Por ejemplo, los agricultores de India han venido organizando protestas masivas durante los últimos años contra la OMC. Su ira fue afilada al ser testigos de la dura presión que su gobierno enfrentó durante las conversaciones, que incluyó al menos tres llamadas personales del Presidente Bush al Primer Ministro Manmohan Singh durante las negociaciones. Los agricultores de Indonesia, India, Filipinas, Brasil y otros países presionaron a sus representantes en Ginebra, mientras que mantenían a la sociedad civil en sus países enterada sobre el estado de las negociaciones. Juntos presionaron a sus gobiernos a resistir las exigencias que van en contra del desarrollo y contribuyeron a asegurar la victoria del colapso.


Tumbando la escalera del desarrollo


Una dinámica similar surgió en el otro pilar fundamental de las negociaciones de Ginebra, en relación a los aranceles sobre bienes industriales. Los aranceles son esencialmente impuestos que pagan las empresas a los gobiernos extranjeros por el privilegio de vender sus productos y obtener una ganancia en otro país. El uso estratégico de los aranceles ha sido una estrategia fundamental de cualquier política de industrialización. Los gobiernos aumentan los aranceles para brindarle protección a las industrias nacientes de la competencia extranjera y para promover el empleo y el desarrollo nacional y luego, cuando las industrias son competitivas, reducen estos aranceles para que los consumidores ahorren dinero. Como ilustra el economista de Cambridge, Ha-Joon Chang, EE.UU. y el Reino Unido tenían los aranceles más altos del mundo al principio del siglo pasado, durante el periodo de industrialización de estos países. Ahora, los países ricos están esencialmente diciendo, "Haz como yo digo, no como yo hice", argumentando que los países en desarrollo deben reducir sus aranceles porque ahora los países ricos tienen tarifas más bajas y son más ricos. Esto equivale a "tumbar la escalera" del desarrollo (con la que otros llegaron hasta ese estado).


En la OMC, esto sucede en el ámbito de las negociaciones llamadas "acceso a los mercados no agrícolas", o NAMA, en la jerga de la OMC. Tanto los países desarrollados y en desarrollo se han puesto de acuerdo para reducir los aranceles, dentro del mandato de Doha de buscar una reciprocidad menor a la plena. Esto significa que los países en desarrollo supuestamente obtendrían un mayor "acceso a los mercados" de los países desarrollados (y, por tanto, reducirían sus propios aranceles por un menor porcentaje) que viceversa. Sin embargo, en las negociaciones los países ricos exigen que los países en desarrollo reduzcan sus aranceles en un promedio de alrededor del 60 por ciento, mientras que sólo ofrecen reducir sus propios aranceles la mitad de eso (aproximadamente el 28 por ciento). Esta inversión es oscurecida por el hecho de que en realidad, las negociaciones se centran en una "fórmula Suiza con coeficiente", que parece estar deliberadamente intencionada para confundir al observador común sumergido en obscuridades técnicas.


De acuerdo con la Confederación Sindical Internacional, estas reducciones arancelarias se traducirían en decenas de miles de puestos de trabajo perdidos en los nuevos países industriales, en medio de una crisis de pobreza y falta de avances en el desarrollo en muchos países. Además, la Red del Tercer Mundo ha señalado que los recortes también limitarían las posibilidades de desarrollo industrial para muchos de los países más pobres. La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo estima que las pérdidas arancelarias (que representan una parte importante de los presupuestos de salud y educación de muchos países en desarrollo) ascenderían a casi cuatro veces la cantidad de los pequeños "beneficios" proyectados para los países en desarrollo de la Ronda de Doha.


Afortunadamente, los sindicalistas de Sudáfrica, India, Filipinas, Argentina, Brasil, México y otros países han empezado a expresar cada vez más sus preocupaciones y viajaron a Ginebra para presionar a sus gobiernos, elevar sus voces ante los medios de comunicación y garantizar que los trabajadores en sus países pusieran presión sobre los gobiernos para que defendieran sus intereses. Aunque el tema de las reducciones de aranceles industriales no se presentó como el factor que impidió que se llegara a un acuerdo esta vez, es evidente que seguirá siendo un objetivo principal de los países ricos en las negociaciones.

La ampliación de la OMC agravaría, en vez de resolver, las crisis ambiental y financiera


La agricultura y la combinación de empleos y desarrollo no son los únicos ámbitos en los que cada vez es más evidente que la OMC es un factor que, en lugar de ofrecer una solución, contribuye a las crisis mundiales actuales. La crisis mundial ambiental también requerirá nuevas soluciones innovadoras. Lamentablemente, muchas de esas ideas chocan con las prohibiciones de la OMC sobre políticas de regulación que podrían de alguna manera, sin querer, restringir el comercio. Ya sabemos que el transporte marítimo de productos a decenas de miles de kilómetros a través del planeta a fin de que las empresas puedan aprovechar las ventajas de mano de obra barata en algunos países, la debilidad de las normas ambientales en otros y desarrollar los mercados de consumo en un tercer país, contribuye significativamente al calentamiento global. ¿Realmente deseamos que nuestra capacidad para preservar la vida en nuestro planeta se vea limitada por la OMC?


Ninguna cuestión ha dominado los titulares de este año más que la crisis financiera mundial, ahora existe un amplio consenso en que ésta ha sido facilitada por la falta de reglamentación adecuada en los mercados financieros. Sin embargo, en las negociaciones de la OMC sobre los servicios, los países ricos activamente buscan una mayor desregulación y liberalización de los mercados financieros, lo que representa los intereses de sus industrias financieras. Es ilógico que el Director General de la OMC, Pascal Lamy, haya convocado a la finalización de la agenda de expansión de la OMC como una solución a la crisis financiera mundial, cuando sus políticas reales, con cualquier cálculo razonable, va a contribuir a una mayor inestabilidad.


Aunque las negociaciones sobre los servicios no aparecieron con mucha frecuencia en los titulares, fueron una parte esencial de la agenda de la OMC en julio. Mientras que el presidente de las negociaciones sobre servicios intentó presionar a los países a ampliar el nivel actual de la liberalización de los servicios "hasta lo máximo posible", un grupo de países - Bolivia, Cuba, Venezuela y Nicaragua - rechazó con éxito la maniobra. Enfrentando la situación aun más críticamente, el grupo también distribuyó una propuesta para eliminar los sectores de salud, educación, agua, telecomunicaciones y energía de la OMC usando el argumento de que estos servicios públicos esenciales son derechos humanos que los gobiernos tienen la obligación de proporcionar y, por ende, no deben ser tratados como productos comerciables. Estos esfuerzos fueron inmediatamente apoyados por más de 100 organizaciones de la sociedad civil alrededor de todo el mundo en el transcurso de 36 horas. El Presidente de Bolivia Evo Morales ya había expresado el mismo argumento en una declaración emitida poco antes de las negociaciones de la OMC.


¿Hacia dónde nos dirigimos desde aquí?


Muchos temen que el colapso de las conversaciones multilaterales conduzcan a una mayor presión para que se den acuerdos bilaterales y regionales que utilizan las mismas (y, a menudo, incluso más extremas) políticas de la OMC. Además, cada vez que la Ronda de Doha se ha "derrumbado", se le ha resucitado de entre los muertos subsecuentemente y se han reanudado las negociaciones. Y por supuesto, sin importar cuál haya sido la causa del colapso del intento de expansión, la OMC seguirá regulando el comercio mundial a favor de las ganancias corporativas y en contra de los intereses de los trabajadores, agricultores, consumidores y el medio ambiente.

Sin embargo, esta vez es diferente. La confianza en las políticas corporativas de la globalización se ha erosionado significativamente desde la fundación de la OMC, principalmente debido al abismal fracaso de estas políticas para promover el crecimiento, la equidad y el desarrollo sostenible en ambos, los países del norte y los del sur en las últimas tres décadas (y el fracaso de la OMC en hacer lo mismo desde 1995). Adicionalmente, los estudios que proyectan los "beneficios" de una Ronda de Doha, que han sido muy exagerados por los proponentes de la OMC, han reducido sus cálculos sobre estos beneficios con el tiempo y siguen siendo insignificantes - alrededor de un centavo por día por persona en el mundo en desarrollo. El mejor resumen más reciente de las ganancias y las pérdidas de la OMC se puede examinar aquí.


Al mismo tiempo, algunos gobiernos están experimentando cada vez más con políticas alternativas, como la integración regional, la nacionalización de recursos, el comercio Sur-Sur, y el aumento de los presupuestos para la salud y la educación, que son generadores de crecimiento y prosperidad mucho más eficaces. Sólo para dar un ejemplo, el aumento del crecimiento por encima del promedio de crecimiento latinoamericano de solamente Argentina y Venezuela en los últimos cuatro años ha traído ganancias combinadas de 140 mil millones de dólares a esos dos países. Este crecimiento económico real hace que las ganancias proyectadas de 16 mil millones de dólares para todos los países en desarrollo del mundo combinados (de acuerdo con las proyecciones más recientes del Banco Mundial para una probable conclusión de Doha; ambas cifras en dólares constantes de 2001) sean muy pequeñas.


De igual importancia es que la política mundial se haya realineado desde que Doha se lanzó inicialmente. Los países en desarrollo son mucho menos propensos a aceptar las políticas dictadas por los gobiernos de las naciones ricas y muchos de ellos también han adquirido libertad económica de los dictados del FMI en los últimos años. Aunque Brasil, India y China pueden ser las potencias de mercados emergentes más frecuentemente citadas, los países en desarrollo desde América Latina hasta África y Asia, están exigiendo cada vez más tener una voz más fuerte en los foros internacionales.


En Estados Unidos se están haciendo esfuerzos increíbles para asegurarse de que nuestro próximo presidente y Congreso realmente apliquen políticas comerciales equitativas, demandadas por los ciudadanos que han sufrido por la pérdida de empleos, el estancamiento de los salarios reales y las empresas que se han salido con las suyas durante demasiado tiempo, incluso a través de la nueva Ley de reforma comercial, responsabilidad, desarrollo y empleo (TRADE Act).


Organizaciones de la sociedad civil durante años han desarrollado múltiples ideas para un paradigma diferente para la ampliación de la prosperidad mundial y el desarrollo sostenible a través de políticas que permitan establecer la estabilidad financiera mundial, contribuyan a la solución en lugar de exacerbar la crisis climática y que promuevan la capacidad de los países para alimentar a sus poblaciones, entre otros objetivos. Al derrotar la expansión de la OMC una vez más, el espacio político se ha creado en el cual estas políticas y paradigmas alternativos pueden florecer. Ese espacio también podría desaparecer si la sociedad civil no continúa trabajando para garantizar que las negociaciones no se reanuden.


Lo que se necesita ahora es organización continua para mantener ese espacio político abierto, junto con la voluntad política para convertir la innovación de políticas ya en marcha en un nuevo paradigma económico a nivel mundial que pueda disciplinar las nocivas prácticas corporativas, mientras que en realidad se aumente el crecimiento, reduzca la pobreza y se expanda el desarrollo sostenible a nivel mundial. Sólo entonces es que podrán la víctimas de esa cuarta crisis y una de las más desatendidas – en la cual más de mil millones de nuestros conciudadanos humanos hoy en día sufren a causa de la extrema y a menudo letal pobreza – encontrar la esperanza de un futuro mejor.


* Una nueva película de Stuart Townsend protagonizada por Charlize Theron, La Batalla en Seattle, se estará presentando en cines de teatro selectos del 19 al 21 y del 26 al 28 de septiembre. Consulte www.battleinseattlemovie.com para obtener más información. También puede pedir que la película se muestra en su ciudad. ¡No es a menudo que los estadounidenses llegan a ver en la pantalla grande el poder político de la sociedad civil cuando se une para impugnar el poder corporativo y con éxito cambian el curso de la historia!


Deborah James es la Directora de Programas Internacionales para el Centro para Investigación Economica y Política, y miembro de la Junta Directiva de Global Exchange. Es personaje clave en el movimiento mundial en contra de la OMC, "Nuestro Mundo No Está En Venta", habiendo participado y dirigido actividades de la sociedad civil durante las reuniones ministeriales en Seattle, Cancún, Hong Kong y Ginebra.



domingo, 21 de septiembre de 2008

Charla: Agricultura ecológica y soberanía alimentaria

AGRICULTURA ECOLÓGICA Y

SOBERANÍA ALIMENTARIA


Martes 23 de Septiembre. 19 horas.

Salón de Grados. Facultad de Dercho

Universidad de Murcia.


Ponentes:

Humberto Ríos (Instituto Nacional Ciencias Agrícolas de Cuba)


Víctor Gonzálvez (Sociedad Española de Agricultura Ecológica)


Fernando Funes (Asoc. Cubana Técnicos Agrícolas y Forestales)


Pedro Noguera Méndez (UMU. Facultad de Economía y Empresa)


Una estrategia solidaria para el presente


Organizan:

Acsur Las Segovias.

Entrepueblos.


Soberanía alimentaría es el derecho de los pueblos a definir su política alimentaría, producir y distribuir los alimentos, la cantidad y calidad que necesitan, de acuerdo a su cultura y cosmovisión.

Los-Las consumidoras de todo el mundo estamos asistiendo a una escalada de precios en los alimentos básicos, disparatada en el último año, creando unas condiciones de vida muy difíciles para las comunidades más necesitadas especialmente en los países mas empobrecidos Destruyendo poco a poco, los escasos avances conseguidos en el combate contra la pobreza en el mundo.

El precio del petróleo influye en ello, pero creemos que los principales culpables son la Política Agrícola Común de la Unión Europea, los restricciones a la exportación impuestas pro la Organización Mundial del Comercio y el boom de los biocombustibles impuestos por los Estados Unidos y la Unión Europea, pues están reduciendo los cultivos destinados al consumo humano, favoreciendo el uso de los alimentos como combustible y los movimientos especulativos de los alimentos.

Existe una necesidad urgente de buscar alternativas y soluciones a esta situación y desde diferentes ámbitos pensamos que una de las más importantes reside en las experiencias de las agriculturas locales.

Una de las organizaciones campesinas con mayor repercusión global como es Vía Campesina, mantiene que para proteger las necesidades vitales, los puestos de trabajo, la salud de las personas y al medio ambiente, la alimentación debe permanecer en manos de los pequeños campesinos y campesinas sostenibles, y no puede dejarse bajo el control de las grandes compañías de agro-negocios o de las cadenas de supermercados. Ya que la agricultura industrial no nos provee de comida saludable, y deteriora más fuertemente el medio ambiente, generalizando el uso de semillas modificadas, abonos químicos y grandes programas de riego. Por ello afirman que esto no va a resolver la crisis alimentaría, muy al contrario, la agudizará.

Recientes estudios publicados muestran como las pequeñas explotaciones campesinas ecológicas son al final tan productivas como las explotaciones campesinas convencionales, e incluso algunas estimaciones sugieren que la producción global de alimentos podría incluso incrementarse más del 50% con agricultura ecológica.

De estos asuntos queremos debatir de la mano de expertos invitados, con tu participación y presencia en este encuentro.

sábado, 20 de septiembre de 2008

2ª Semana de la Bicicleta. Del 19 al 25 de septiembre de 2008.

Coincidiendo con la semana Europea de la movilidad, que este año se celebra bajo el lema Aire limpio para todos la asociación Murcia en Bici, organiza la II Semana de la Bicicleta con los siguientes objetivos:

Sensibilizar a la ciudadanía sobre la necesidad de mejorar la calidad del aire de nuestra ciudad y reducir los niveles de contaminación acústica para lo cual es necesario disminuir el uso excesivo de vehículos privados contaminantes.

Animar a las autoridades locales a transformar zonas y vías destinadas a los coches al tráfico no motorizado.

Programa:

* VIERNES, 19
o Parking day.

* SÁBADO, 20
o 12h. La plaza de la bici.
Mercadillo de trueque bicicletero.
Juegos para niños/as.
Taller de decoración de timbres.
Taller de mecánica.
Lugar: Plaza Cardenal Belluga.

* DOMINGO, 21
o Inauguración rutas 'Viviendo la huerta en bici'. Ruta de Auroros y tradiciones.
Lugar de salida : Hospital Reina Sofía. 9.45 h.
Necesaria inscripción previa en: info@carrilbicimurcia.es
Más información.

* LUNES, 22
o 19.30h. Conferencia. 'Agricultura, población y energía: El fin del petróleo barato'. Fernando Ballenilla. Profesor de Didáctica de la Educación Ambiental, Universidad de Alicante.
Lugar: Salón de Grados Facultad de Derecho. Campus de La Merced. Universidad de Murcia.

* MARTES, 23
o 20h. Cine. La Bicicleta. Dir. Sigfrid Monleón.
Lugar: Sala Francisco Rabal. Colegio Mayor Azarbe.

* MIÉRCOLES, 24
o 19h. Carrera de medios. (Comparativa de medios de transporte).
o 20h. Visita Turística a la ciudad de Murcia.
Lugar de encuentro: Plaza Circular.
Necesaria inscripción previa en: info@carrilbicimurcia.es

* JUEVES, 25
o 20h. Masa Critica.
o 21h. Bicitapeo.

* Organiza: Asociación Murcia en Bici.

Descargas :

VIVE LA HUERTA EN BICI

La Asociación Murcia en Bici, propone para este otoño, seis diferentes rutas temáticas en bicicleta por la huerta de Murcia. En ellas se podrán conocer y vivenciar elementos significativos de la cultura, el arte y las tradiciones de nuestra huerta.

Los itinerarios consistirán en tranquilos recorridos matinales asequibles a todos los públicos. Todos ellos han sido diseñados por profesionales de reconocida experiencia y prestigio, y serán guiados por monitores voluntarios formados por éstos.

Se irán realizando paradas en los lugares oportunos para contemplar y explicar los detalles relativos al tema de cada ruta, o proceder a demostraciones en vivo. El punto de partida y llegada será siempre la ciudad de Murcia.

La intención de la Asociación Murcia en Bici con este proyecto es revitalizar la unión de dos elementos que históricamente siempre han estado ligados: la bicicleta y la huerta. Con ello se pretende tanto potenciar el uso de este tradicional medio de transporte, más humano y sostenible, como divulgar y fomentar la valoración de la vida y costumbres de la huerta murciana.
La participación en estas rutas es de carácter gratuito. Las plazas están limitadas a 40 personas por ruta, siendo necesaria inscripción previa.
Inscripciones: Rellenando el formulario de más abajo o enviando mail a info@carrilbicimurcia.es, en ambos casos indicar nombre, apellidos y la rutas o rutas que se desean realizar. En el caso de los niños/as contarán como un adulto si van en su propia bicicleta.

¡Ven a disfrutar de la huerta pedaleando y descubre un mundo muy nuestro, muy próximo y muy desconocido!

INDICE DE RUTAS Y FECHAS:

1. RUTA DE AUROROS Y TRADICIONES 21 de septiembre 08

2. RUTA DEL AGUA 28 de septiembre 08

3. RUTA DE LAS ERMITAS 05 de octubre 08

4. RUTA BOTÁNICA 12 de octubre 08

5. RUTA DE LAS CASAS TORRE 19 de octubre 08

6. RUTA DE LOS CASTILLOS 26 de octubre 08

Más información: Tel: 676 369 883/652 466 384 info@carrilbicimurcia.es



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miércoles, 17 de septiembre de 2008

Declaración III Foro Social Mundial de las Migraciones

La Asamblea de los Movimientos aprueba en Rivas la declaración con la que se cierra el III Foro Social Mundial de las Migraciones


Hoy, cuando conmemoramos los sesenta años de la Nakba palestina, los 20 años del inicio de las muertes en el Estrecho de Gibraltar, los 35 años del golpe militar contra el gobierno democrático de Salvador Allende; cuando esa misma legitimidad está gravemente amenazada en Bolivia y convoca nuestra conciencia y solidaridad, y cuando celebramos los 60 años de la Declaración Universal de Derechos Humanos, nosotros, mujeres y hombres que somos parte de más de dos mil movimientos y organizaciones sociales de noventa países del planeta, nos reunimos en Rivas Vaciamadrid (España), del 11 al 14 de septiembre de 2008, bajo el lema: 'NUESTRAS VOCES, NUESTROS DERECHOS, POR UN MUNDO SIN MUROS'.

Nuestras Voces

Somos personas y organizaciones de migrantes, desplazados/as y refugiados/as; víctimas del tráfico de seres humanos y la trata; somos también movimientos y organizaciones sociales trabajando junto a ellos; somos sujetos individuales y colectivos que, preocupados por el hecho migratorio comprendido en su integralidad, nos hemos ocupado de desarrollar acciones comprometidas con la transformación radical de las condiciones en las que los seres humanos se han visto obligados a migrar, desplazarse o refugiarse .

Nosotras, las personas migrantes, desplazadas y refugiadas y nuestras organizaciones, nos constituimos en un nuevo sujeto político y en una fuerza social mundial que se consolida en este III Foro Social Mundial de las Migraciones. Por todo lo anterior y con legítimo derecho, levantamos nuestras voces para decir:

No al creciente deterioro de las condiciones de vida que impacta a la mayoría de las personas del planeta, en el norte como en el sur global y que impacta de manera especial a las personas migrantes, refugiadas y desplazadas de los diferentes continentes, y muy especialmente las de los pueblos palestino, saharaui, colombiano, sudanés e iraquí y a las políticas cómplices de Estados Unidos, Europa y España en particular.

No a las migraciones forzadas de los pueblos indígenas como resultado de la expropiación de sus tierras y de los megaproyectos agroindustriales, que traen como consecuencia el desarraigo y la destrucción de sus culturas.

No a las diferentes manifestaciones de racismo en contra de las personas y comunidades migrantes en todos los continentes y particularmente, en contra de las personas de Africa Negra y la comunidad latina en los Estados Unidos

No a la reproducción y el fortalecimiento de un sistema patriarcal que, en el contexto de la feminización de las migraciones, profundiza aun más la asimetría de género ya existentes, y se traduce en la continuidad de la ubicación de la mujer en trabajos relacionados al ámbito privado y al cuidado de otros, en condiciones de esclavitud.

No a los proyectos que estigmatizan, segmentan y excluyen a las personas migrantes y sus familias y deterioran el tejido social comunitario y organizativo. Rechazamos la pretensión de transformar las remesas en sustituto de políticas estatales de desarrollo en los países de origen y en refuerzo al circuito financiero del capital, ampliando aún más las históricas asimetrías sociales, políticas, económicas y culturales.

No al discurso mediático convencional que desde los estereotipos, refuerza la criminalización y la victimización de las personas migrantes como discurso hegemónico; a la xenofobia, la discriminación y el racismo que se propaga desde ellos y que acrecienta esas conductas y prácticas en las sociedades y países de tránsito y destino de personas migrantes.

No a la globalización capitalista, neoliberal, concentradora y excluyente, depredadora del ser humano y de la naturaleza y que en su conjunto representa la causa fundamental de las migraciones contemporáneas.

Nuestros Derechos

Somos sujetos que nos hacemos cargo de procesos; analizamos e interpretamos la compleja realidad del hecho migratorio, desde el lugar del ser humano, su dignidad y la integralidad de nuestros derechos humanos; imaginamos y ponemos en marcha iniciativas múltiples y diversas y apostamos por nuestro protagonismo histórico, por la construcción de otra realidad:

En las condiciones actuales del capitalismo mundial, las personas migrantes somos una muestra evidente de las desigualdades económicas y sociales entre los países y dentro de los países. Situación que se profundiza por la sincronía de una crisis mundial, multidimensional: económica, ambiental, alimentaria y energética.

La construcción de muros geográficos, políticos, legales y culturales, como la directiva europea de “la vergüenza”, y otras leyes públicas y disposiciones oficiales similares, son una estrategia criminalizante que, en aras de la mayor rentabilidad del capital internacional, elimina todos los derechos humanos. Para ello se recurre, además, a la externalización de fronteras, la internalización mental a través de la persecución, el hostigamiento y las deportaciones; las detenciones arbitrarias, la impunidad policial fronteriza y los centros de internamiento, donde la violación de los derechos humanos es cotidiana

Insistimos en que los acuerdos laborales bilaterales y regionales inspirados en el modelo filipino de programas temporales de trabajadores huésped que, al impedir el arraigo, anula cualquier posibilidad de reivindicar sus derechos, propiciando la sobreexplotación y deshumanización de las personas trabajadoras, cumplan plenamente con las obligaciones establecidas en los convenios 97 y 143 de la OIT; sin lo cual se profundiza el deterioro integral del Trabajo Humano, con pérdida de su valor salarial, social y jurídico, convirtiendo a las personas migrantes en mercancías.

Afirmamos la necesidad de defender, reivindicar, extender, frente al trabajo forzado, esclavo y precario, el trabajo digno para una vida digna, que integre libertad, igualdad de trato y contraprestaciones negociadas adecuadas para todas las personas trabajadoras.

Valoramos las iniciativas de economía solidaria que fortalecen el tejido asociativo y contribuyen a procesos de economía social y desarrollo integral de las personas. Rechazamos su utilización como instrumento para negar el derecho a migrar.

Promovemos la ciudadanía universal y ratificamos el derecho de las personas a la libre movilidad como establece la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Por un mundo sin muros

Un mundo sin muros es una condición esencial para construir otro mundo posible; el cumplimiento pleno de los artículos 13 y 14 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos es una exigencia y nos compromete a continuar en nuestra lucha por los derechos de todas las personas migrantes.

Por ello exigimos:

la firma, ratificación y puesta en práctica de la Convención Internacional sobre los Derechos Humanos de los Trabajadores Migratorios y sus Familias por parte de los Estados que no lo han hecho. Saludamos a los Estados que la han ratificado y demandamos adecuen su marco normativo nacional a las exigencias de la Convención. Saludamos el compromiso por parte de los gobiernos municipales iniciado por el gobierno de Rivas Vaciamadrid de trabajar en la campaña a favor de la ratificación.

el establecimiento de un mandato o procedimiento especial dentro del sistema de la ONU para suplir los vacíos en los instrumentos existentes de protección de las personas migrantes, CMW (Comité de Trabajadores Migratorios), relator especial, ACNUR y el representante especial para las personas desplazadas internas.

la derogación de la directiva de retorno de la UE, así como de todos los instrumentos legales que permiten la detención de migrantes en el mundo; el desmantelamiento del Frontex y de todos los dispositivos policiales y militares que securitizan las políticas migratorias y la fiscalización por parte de organizaciones sociales de los centros de internamiento, hasta su cierre definitivo.

que las fronteras del mundo dejen de ser espacios de impunidad en los que las personas migrantes son objeto de todo tipo de violaciones, crímenes y obligados a asumir riesgos que ponen en peligro su vida. Demandamos que los países de origen, tránsito y destino, asuman su responsabilidad para revertir esta situación.

la regularización de todas las personas migrantes sin papeles en todo el mundo.

el reconocimiento de otras formas de persecución y la ampliación jurídica de las causas que se reconocen como asilo, refugio y trata de personas, garantizando que las solicitudes y los procedimientos cumplan con todo lo que prevé la ley y centren los derechos humanos de estos colectivos. Igualmente, demandamos el cumplimiento de las condiciones que el Derecho Internacional exige para el retorno de los refugiados.

la denuncia de todos aquellos convenios de expulsión, generalmente impuestos a los Estados de origen o tránsito, que a menudo conllevan graves violaciones de los derechos, ruptura familiar, represalias de las autoridades del país de origen y un grave desarraigo de las personas migrantes.

la anulación de los acuerdos y claúsulas de re-admisión y el cese de toda negociación de acuerdos de este tipo entre la Unión Europea y los países terceros y entre los países terceros.

la promoción de las personas y comunidades migrantes para que se organicen, se rebelen, denuncien toda forma de dominación y explotación y hagan valer sus derechos, fortaleciendo sus organizaciones y las redes de apoyo mutuo.

el cumplimiento de la legislación internacional que garantiza la protección adecuada de los niños y niñas que son parte importante de los flujos migratorios internacionales.

la incorporación en nuestras luchas de la reivindicación de una justicia medio ambiental y el reconocimiento y protección jurídica de los refugiados que provoca el cambio climático y la destrucción del medio ambiente, urgiendo un nuevo orden mundial que promueva la dignidad humana de todas las personas, en sintonía con las potencialidades de nuestro planeta tierra.

la aplicación de políticas encaminadas a garantizar la igualdad de oportunidades profundizando mecanismos de inclusión que no dependan de la situación administrativa de las personas migrantes; de políticas que integren, en los servicios públicos, la diversidad cultural de las personas migrantes en los servicios públicos; de políticas a largo plazo para la integración de los jóvenes y para el avance en la equiparación de derechos para los colectivos migrantes de LGTB y sus familias.

el derecho al voto en el ámbito municipal y la participación activa en la definición de los planes locales de desarrollo y el respeto a la autonomía de las organizaciones y movimientos sociales, de tal manera que el ejercicio pleno de la ciudadanía de las personas migrantes sea efectivo.

la participación política del migrante para incidir, tanto en la política interna como en la política externa, de un país de llegada, a favor de su país de origen, visibilizando los beneficios que las personas migrantes traen, constituyéndose en sujetos activos.

la continuación del proceso de redacción colectiva de la Carta de los Migrantes así como la de todos aquellos procesos e iniciativas que signifiquen el fortalecimiento de la defensa de los derechos de las personas migrantes.

la multiplicación y fortalecimiento de medios de comunicación democráticos, incluyentes que, desde las voces de las personas y comunidades migrantes, reflejen adecuadamente la complejidad de la migración.

Queremos recuperar la dimensión del sujeto humano, de la dignidad humana evitando que la lógica mercantil afecte nuestra relación como movimientos sociales. Asumir que nuestra identidad como migrantes, refugiados y desplazados no niega nuestras otras múltiples identidades y luchas.

Migrar no es un delito, delito son las causas que originan las migración. Levantemos nuestras voces, defendamos nuestros derechos, luchemos juntos por construir un mundo sin muros.

En Rivas Vaciamadrid, a 13 de septiembre de 2008


lunes, 15 de septiembre de 2008

Comunicado de la Alianza Española Contra la Pobreza

Desde distintos sectores sociales, y uniendo diversidad de sensibilidades e intereses, la sociedad civil española se muestra unida para hacer un llamamiento conjunto a toda la ciudadanía para que se movilice hasta lograr medidas concretas contra la pobreza mundial y, sobre todo, contra sus principales causas.

La injusticia, la desigualdad, la discriminación, la violencia y la pobreza afectan a millones de personas en el mundo, y no vamos a quedar impasibles ante semejante indignidad. Porque sabemos que la pobreza puede erradicarse si existe la voluntad política para hacerlo.

El llamamiento se torna especialmente necesario en los momentos actuales, ya que la situación descrita anteriormente se ve agravada por la concurrencia de múltiples crisis – de índole financiera, alimentaria, ecológica y petrolera – derivadas del actual modelo comercial, industrial, financiero, de producción y consumo seguido por los países poderosos e impuestos a los países empobrecidos, cuyas consecuencias recaen principalmente sobre las personas y pueblos más vulnerables y empobrecidos.

Los líderes y gobernantes mundiales tienen la responsabilidad de hacer cumplir la agenda de la ciudadanía, y queremos lanzar un llamamiento universal contra la pobreza, porque creemos con firmeza que otro mundo más justo, sostenible y más humano es posible.

En el año 2000, los jefes de Estado y de Gobierno de 189 países, así como las instituciones internacionales, acordaron cumplir 8 Objetivos de Desarrollo del Milenio en todos los países del mundo para el año 2015 como un primer paso para acabar con la pobreza extrema. Han pasado ocho años y los avances son insuficientes. Además, algunos de los Objetivos del Milenio, como el 8, van en sentido contrario.

El Estado español, perteneciente al conjunto de los países más ricos del mundo, debe representar fielmente el sentir solidario y comprometido de su ciudadanía, y para ello debe impulsar con la mayor urgencia un conjunto de medidas concretas para que los países y pueblos empobrecidos del mundo dispongan de oportunidades reales para salir de la pobreza extrema, así como la adopción de modelos de vida sostenibles que impliquen una equitativa redistribución de la riqueza y no generen exclusiones.

Con el objetivo prioritario de erradicar la pobreza, así como de denunciar y combatir sus causas EXIGIMOS:

a) Más y mejor Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) hasta alcanzar el 0,7% del PNB con la máxima urgencia, observando los principios de la Declaración de Paris sobre eficacia de la ayuda, reforzando la orientación geográfica hacia los Países Menos Adelantados, destinando un 20 % del total de la AOD a servicios sociales básicos y desligando la ayuda de intereses económicos y comerciales.

b) Reforzar la financiación contra la pobreza con fuentes adicionales como son los impuestos globales (tipo Tasa Tobin) y la aplicación de nuevos y especiales impuestos sobre beneficios extraordinarios conseguidos por las empresas y las instituciones financieras: no hay justicia social sin justicia fiscal, ya que impuestos justos bien distribuidos significan siempre menos pobreza.

c) Abolir el 100% de la Deuda Externa bilateral de los Países Menos Avanzados (PMA), instando una posición similar por parte de nuestro gobierno ante las instituciones financieras internacionales para que cancelen la deuda multilateral de esos mismos países.

d) El tratamiento de la Deuda Externa en todos los países, especialmente para los países que más deuda tienen contraída con el Estado Español, implica adoptar mecanismos eficaces para determinar y exigir responsabilidades respecto de aquellas deudas ilegítimas que hayan sido generadas con gobiernos corruptos o que violen los derechos humanos, así como la devolución de la deuda ecológica contraída por las empresas transnacionales o por los países industrializados.

e) Asimismo se requiere comprometer iniciativas de conversión de deuda externa bilateral por desarrollo, para que los recursos liberados se destinen a su inversión en los Objetivos del Milenio, empleando mecanismos que no generen más deuda externa y que no supongan más ayuda ligada a intereses económicos o comerciales españoles.

f) Cambiar las normas del comercio internacional (acuerdos de la OMC, Tratados de Libre Comercio, Acuerdos de Asociación Económica, etc.) que actualmente privilegian los intereses de países ricos e impiden a los pequeños agricultores y a los gobiernos de los países empobrecidos decidir cómo luchar contra la pobreza, proteger el medio ambiente y garantizar el Derecho a la Alimentación. Asimismo, eliminar las subvenciones de todo tipo que permiten exportar a los países empobrecidos los productos de los países ricos por debajo del coste de producción, dañando el sustento de las comunidades locales. Esto se hace especialmente acuciante en la actual situación de crisis alimentaria y de materias primas, motivadas principalmente por estas políticas, la producción de agrocombustibles y la especulación en el mercado de materias primas.

g) Proteger los servicios públicos de liberalizaciones y privatizaciones, excluyéndolos del marco de las negociaciones del Acuerdo General sobre el Comercio de Servicios de la OMC y de la Directiva de Servicios en el Mercado Interior de la UE, con el fin de asegurar los derechos de acceso al agua potable, a la educación, a la atención sanitaria y a los medicamentos esenciales.

h) Velar por la existencia y creación de empleo digno y con derechos, como mecanismo eficaz para luchar contra las desigualdades, erradicar la pobreza y promover la equiparación entre mujeres y hombres. Exigir a las Empresas Multinacionales españolas que respeten las normas internacionales de trabajo y convenios de la OIT en sus filiales, y los hagan respetar a las empresas proveedoras y subcontratadas, así como que mantengan una conducta socialmente responsable. También en este campo la actuación se torna especialmente necesaria, dado el agravamiento de la situación motivado por la reciente aprobación de Directivas de la UE, como las de Tiempo de Trabajo y de Retorno de inmigrantes irregulares, que suponen un claro recorte de los derechos laborales y sociales, especialmente el derecho de negociación colectiva, y cuya aplicación debería rechazar el gobierno español.

i) Combatir de forma decidida la actividad desarrollada por los mal llamados paraísos fiscales, que, como centros financieros extraterritoriales ampliamente utilizados por los mercados financieros globalizados, provocan fuertes disminuciones en la recaudación fiscal de todos los países, pero sobre todo de los del Sur, donde las reducciones de ingresos por fugas de capitales se estiman en más de 50 mil millones de dólares anuales.

ALIANZA ESPAÑOLA CONTRA LA POBREZA

ATTAC España - ASDE Federación de Asociaciones de Scout de España - Campaña Pobreza Cero - Coordinadora ONG Desarrollo España (CONGDE) - Campaña Quién Debe a Quién (QDQ) - Campaña del Milenio de NNUU - Comisiones Obreras (CCOO) - Confederación española de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA) - Conferencia Española de Religiosos (CONFER)- Consejo de la Juventud de España (CJE) - Consejo General de Colegios Oficiales de Diplomados en Trabajo Social y Asistentes Sociales - Coordinadora Española del Lobby Europeo de Mujeres (CELEM) - Ecologistas en acción - Escritores por la Paz - Foro social de Madrid - Federación de Asociaciones de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos - Federación de Asociaciones para Defensa de la Sanidad Pública - Federación de Entidades Evangélicas de España (FEREDE) - Federación de Organizaciones Sindicales Unión Sindical (US) - Grupo de Interés Español en población, desarrollo y salud reproductiva (GIE) - Iglesia Evangélica Española - Plataforma 0,7 - Plataforma 2015 y más - Plataforma de ONG de Acción social (POAS) - Plataforma por la defensa de los servicios públicos - Plataforma Rural española - Red Española de lucha contra la pobreza (EAPN-es) - Sindicatos de trabajadores y trabajadoras de la enseñanza (STEs-i) - Stop exclusión - Unión General de Trabajadores (UGT) - Unión Sindical Obrera (USO)